Vengo de una familia de clase media, soy la segunda de cinco hermanos, dos chicos y tres chicas, desde pequeñita mis padres me han inculcado lo importante que es para una persona, tener una “buena formación” en todos los aspectos de la vida.

Por mi parte, a mí siempre me ha entusiasmado el descubrir cosas nuevas.

Mi padre es catedrático de Lengua y Literatura y en casa hemos tenido librerías llenas de libros, yo me ofrecía a limpiarles el polvo y me podía pasar la mañana entera de un sábado, pues cada libro que cogía entre mis manos para limpiar, lo ojeaba y si me parecía interesante, ya estaba entretenida un buen rato…

Él mismo es autor de gran cantidad de libros.
Los libros de mi padre en gran medida hablan de cómo expresarse correctamente, de la comunicación efectiva, de las reglas de ortografía…

El cómo se expresa una persona, tanto de forma oral , como escrita, dice mucho de ella…

“Una buena formación es el mejor vestido que te puedes poner”, he escuchado siempre de mi madre, porque va a “vestir tu mente”.